Mª del Carmen V. Rastrilla Calleja
Miembro del GEMFE
Resumen
Se describe el caso de una gata adulta que acude a nuestra consulta con un problema
de inestabilidad dental y formación de papiloma pulpar en uno de los colmillos. En el
momento de la consulta no presenta más sintomatología, pero posteriormente aparecen nuevos signos clínicos como dolor y anorexia.
Tras examen clínico, radiológico y laboratorial, se diagnostica Lesión Resortiva Odontoclástica Felina y se instaura un tratamiento con antiinflamatorio no esteroideo
(AINE), dieta hipoalergénica y un medicamento cuyos resultados aún se encuentran
en estudio, el alendronato. En los exámenes clínicos posteriores se observa buen control con el tratamiento.
USO DEL ALENDRONATO EN LA LESIÓN RESORTIVA ODONTOCLÁSTICA FELINA A PROPÓSITO DE UN CASO CLÍNICO
Introducción
La lesión resortiva odontoclástica felina es una de las enfermedades más frecuentes en gatos y su prevalencia aumenta con la edad. Muchas veces lleva a la pérdida progresiva de los dientes.
A pesar de haber sido relacionada con factores como el aumento de la vitamina D en la dieta, traumatismos, factores endocrinos y virales o enfermedad periodontal, no se ha llegado a ninguna conclusión sobre la etiología de la misma, aunque se cree que todos éstos factores pueden llegar a agravar el curso de la enfermedad.
El cuadro clínico puede variar dependiendo del grado de la enfermedad, según el cual, se puede clasificar en 5 tipos dependiendo de la alteración presenta en el hueso. En ocasiones de puede detectar en una exploración rutinaria sin quemexista sintomatología y en otros casos puede aparecer dolor, anorexia, hipersalivación, halitosis, gingivitis o gingivoestomatitis y pérdida de peso.
El diagnóstico está basado en un buen examen de la cavidad oral y radiografías dentales, donde se puede apreciar radiolucidez en estructuras del
diente, pérdida de las raíces, desaparición del ligamento periodontal y anquilosis.
Si hay otras lesiones en la cavidad oral, conviene descartar otras enfermedades virales o metabólicas como alteración de los niveles de calcio y
fósforo en casos de alteración de glándula paratiroides o aumentos de urea y creatinina.
Para el tratamiento se han utilizado varias opciones terapéuticas como la aplicación de fluoruro tópico, laserterapia o restauraciones dentales, pero no se han conseguido resultados satisfactorios.
En casos graves, la extracción dental completa es la mejor opción terapéutica.
El alendronato es un tratamiento innovador, aún está en estudio, que se cree puede ser un tratamiento adecuado para la detención del progreso de ésta enfermedad.
Caso Clínico
Acude la clínica una gata de 9 años de edad, raza común europea, hembra esterilizada de 3 Kg de peso y con la cartilla de vacunaciones y desparasitaciones al día (Figura 1), con un cuadro agudo de movilidad dental en el colmillo inferior derecho.

La propietaria desconoce si ha existido algún traumatismo previo.
En la exploración se observa ausencia de placa dental, formación de un granuloma pulpar en el canino inferior derecho e inestabilidad del mismo.
En la anamnesis la dueña no refiere anorexia, dolor ni otro tipo de sintomatología.
Se le plantea la posibilidad de la extracción dental, pero rehúsa y decide esperar a que el diente caiga por si mismo. Se recomienda el uso de una dieta hipoalergénica.
Al cabo de veinte días, la paciente vuelve a la consulta. El colmillo ha caído, pero ahora presenta movilidad en el canino superior derecho con resorción de la encía. Se aprecia linfadenopatía submandibular y se ha producido una pérdida de peso a pesar de que la gata come bien, según nos indica su dueña.
Se plantea una serie de diagnósticos diferenciales, entre los cuales se incluye:
- Traumatismo
- Enfermedad periodontal; gingivitis, estomatitis
y periodontitis - Gingivoestomatitis crónica felina
- Enfermedades viricas; FeLV, FiV, Calicivirus
- Granuloma por cuerpo extraño
- Tumores
- Lesión resortiva
Se descarta el origen traumático ya que ha sido afectado más de un diente en periodos distintos. No existe enfermedad periodontal, ya que no se evidencia la presencia de sarro ni acúmulo de placa. Tampoco se detecta en la exploración la presencia de ningún cuerpo extraño ni masas orales.
La gingivoestomatitis crónica felina es una enfermedad de aparición más temprana y afecta a una mayor parte de la estructura de la boca y prioritariamente en otras localizaciones, por lo que también de momento, queda excluida.
Exámenes Complementarios

- Hemograma y bioquímica, resultando todos los
valores dentro de la normalidad - Pruebas serológicas para FeLV y FiV y PCR para
Calicivirus, siendo los resultados negativos - Radiología donde encontramos resultados compatibles con enfermedad resortiva. (Figura 2)
Hallazgos radiológicos; en la lesión resortiva odontoclástica, aparecen defectos líticos en la raíz de los dientes, justo debajo de la línea de la encía y progresan para convertirse en grandes cavidades que involucran tanto a la corona como a las raíces. Estas lesiones pueden provocar la fractura del diente y la pérdida de la corona con las raíces
permaneciendo “in situ”.
En las imágenes radiográficas se puede apreciar radiolucidez en estructuras dentales, pérdida de raíces, desaparición del ligamento periodontal y anquilosis.
En el caso que nos concierne, se pueden observar algunas de éstas alteraciones, siendo la más destacable, la radiolucidez de algunas zonas.
Se realiza por tanto un diagnóstico definitivo de Lesión Resortiva Odontoclástica Felina y se instaura un tratamiento con Metacam oral (Boehringer Ingelheim 5 mg/ml) a dosis de 0,05 mg/kg/d durante 10 días, cambio a una dieta hipoalergénica (Hills Prescription Diet z/d) y alendronato a dosis de 9 mg/kg oral (John R. August, Medicina Interna Felina Vol. 5 ) dos veces por semana mezclado con atún para hacerlo más palatable. (Figura 3). En nuestro caso usamos cápsulas de 30 mg preparadas en una farmacia a partir del principio activo.
Discusión
Uso del alendronato para tratar una enfermendad felina
En éste caso en particular, se decidió usar el alendronato como tratamiento experimental, con la autorización de la propietaria tras la explicación de sus posibles usos y a sabiendas de que los resultados están aún por demostrar.
Se trata de un hipocalcemiante, inhibidor de la resorción ósea. Presenta gran afinidad por unirse a la hidroxiapatita del hueso impidiendo la disolución de cristales de la misma e impidiendo así mismo la resorción ósea por parte de los osteoclastos al disminuir su actividad.

En medicina humana se usa para el tratamiento de la osteoporosis, reduciendo el riesgo de fracturas vertebrales y de cadera, por lo que su uso como inhibidor de la resorción ósea en pequeños animales, especialmente en la especie felina, se cree que pueda dar buenos resultados como tratamiento para patologías como la Lesión Resortiva Odontoclástica.
No se recomienda su uso en casos de insuficiencia renal ni hipocalcemia.
Como reacciones adversas, se pueden observar trastornos gastrointestinales, especialmente en la parte superior del tracto digestivo, por lo que no se recomienda su uso prolongado con AINEs.
Se deben vigilar posibles síntomas que indiquen efectos secundarios de éste tipo, así como descensos del calcio sérico o alteraciones en la
función renal, en cuyo caso se recomienda la suspensión del tratamiento.
En nuestro caso, al cabo de dos meses de comenzar con el tratamiento, la gata recupera peso, la inestabilidad del colmillo está disminuida y no hay alteraciones en más piezas dentales. El estado general es muy bueno.
Seis meses después de repiten las radiografías y no se observa avance de la enfermedad. (Figura 4) Actualmente ha transcurrido año y medio desde el diagnóstico y parece existir un control adecuado de la enfermedad sin progresión de la misma ni la aparición de efectos adversos, por lo que se prosigue de forma continuada con el mismo tratamiento a base de alendronato y de dieta hipoalergénica.

A pesar de no tratarse de una gingivoestomatitis crónica, ni de haber tenido una buena respuesta con la dieta como tratamiento único en un primer momento, se continúa con la misma ya que al no conocer de forma cierta la etiología de la enfermedad, se considera que también puede existir una posibilidad de que la patología pueda tener
un origen inmunomediado y la ingestión de un alimento con proteínas de bajo peso molecular que no estimulen la respuesta del sistema inmune del animal pueda ser favorable para el mantenimiento a largo plazo.
Así pues, a pesar de no existir evidencias que avalen el uso de alendronato de forma rutinaria actualmente, parece ser que en éste paciente, los resultados a corto y medio plazo son satisfactorios, quedando aún en el aire su efectividad a largo plazo y su uso en todo tipo de pacientes.
Bibliografía
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